Sabes, en ocasiones la forma de ser, de expresarse y desenvolverse de una persona (atento, servicial, cariñoso, divertido, etc.) llega a "deslumbrarnos", le atribuimos cualidades, virtudes... que después de analizarlo concienzudamente (cuando la marejada de sensaciones, pasiones, etc., nos han dejado en calma) notamos que no posee...
Pero en ese momento, estar al lado de esa persona nos hace sentir especiales, amados, protegidos y el hecho de pensar en perderla nos llega a preocupar, nos vuelve indecisos, sobreprotectores, celosos... de algún modo nos sentimos vulnerables... porque toda nuestra atención está enfocada hacia esa persona....
Y cuando algo sucede... nos sentimos mal, porque todas nuestras aspiraciones se derrumban con su partida (felicidad, vida futura, amor, familia, cariño, comprensión).
Todo en una sola persona, todo depende de que ese alguien te acepte... que te quiera...
Pero y ¿qué hay de ti? En qué momento te has preocupado por tu persona, tus aspiraciones, tus necesidades... tus sentimientos...
El amor para que sea real necesita ser correspondido, saber que existe, que no haya duda de su existencia... el amor no es una quimera... y si lo es, entonces sólo es una suposición de tu parte... algo que tú misma has creado... pero que no es real...
Espero que esta respuesta pueda de algún modo ayudarte en este trance de tu vida.